El blog de hoy está dedicado al emprendimiento porque todas las grandes empresas empezaron con una pequeña idea, y tuvo que ser una persona o un grupo de personas detrás de ella, quienes la lograron hacer realidad. ¿Cómo? Con esfuerzo, dedicación, compromiso y ciertos hábitos que les permitieran continuar su proceso cuando las amenazas o debilidades parecieron más grandes que las fortalezas y las oportunidades. En eso radica la importancia del hábito, te permite continuar y te hace crecer.
El mundo está lleno de personas con buenas ideas pero son pocos los que las ejecutan realmente. Por eso hoy queremos compartir con ustedes 5 hábitos que impulsan el desempeño y hacen que las ideas tomen forma.
Los emprendedores se caracterizan por:
1. Pensar en grande: Dedicar tiempo a idear y soñar es muy necesario, en especial cuando se trata de empresas. No basta con pensar en un producto, se debe pensar en un negocio que tenga varias salidas y no dependa enteramente de una sola forma de consumo. El hábito para cultivar esta forma de pensar es cuestionarse estratégicamente qué tan limitada es la idea y cómo podría llevarse a un panorama más grande con diversas posibilidades, diferentes consumidores y etapas de vida.
2. Hacer pruebas: Cientos de errores y oportunidades de mejora aparecen en las “pruebas piloto” y en los primeros intentos. Contrario a lo que algunos pensarían, esto es ¡muy positivo! ya que detectar las equivocaciones a tiempo y actuar asertivamente hará la diferencia entre anticiparse a los posibles errores o tener que enmendarlos.
3. Planear y organizar: ¿Qué tal si cada día dedicas un rato a hacer una lista con las tareas por cumplir? Esto no sólo te ayudará a reconocer los pendientes, sino establecer prioridades y actuar conforme a las necesidades. Hoy en día existen un sinnúmero de plataformas para hacer seguimiento de los procesos, organizar equipos, repartir tareas y hacer una correcta planeación de las pequeñas tareas que al desarrollarse, se convierten en grandes proyectos.
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4. Calcular y asumir el riesgo: Una de las razones por la cuales las personas se quedan en las ideas y no en su ejecución es por miedo a perder o fracasar, pero el riesgo siempre existe, lo importante es calcularlo, mitigarlo y asumirlo. Con los hábitos anteriores ya habrás mitigado algunos factores previsibles, así que adelante. No dejes que el miedo al riesgo te impida ejecutar, ya que ésta es la parte más emocionante del proceso, es lo tangible, lo medible y replicable.
5. Aprender de los demás: Puede ser alguien conocido que ya haya atravesado un camino parecido al tuyo o puede ser un desconocido que sea referente en el sector de tu interés. Sea como sea, aprender de los demás será siempre un gran hábito para facilitarnos el camino en el competido mundo del emprendimiento.
Si te gustó este tipo de contenido, aquí encontrarás más tips para alcanzar tus metas mediante hábitos y comportamientos que hacen la gran diferencia.
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