Los líderes tienen un papel fundamental al momento de enfrentar la crisis y los cambios.
Los seres humanos somos extremadamente susceptibles a las emociones, en especial, a las negativas, así como a la forma de pensar de las personas con quienes pasamos la mayor parte del tiempo.
Por eso, el papel de un líder es determinante. Su entusiasmo o pesimismo puede contagiar a los demás y afectar al grupo de trabajo. De él o ella dependerá que el efecto sea positivo o negativo.
El líder, lejos de ser un héroe también puede preocuparse y temer al cambio, pero debe ser el primero en observar objetivamente la situación y tomar acción.
Les compartimos cuatro pensamientos que caracterizan a cualquier líder.
- Ser positivo y realista: Sería imposible resolver los problemas de los demás o las enormes contingencias externas, pero podemos actuar con empatía, fijar límites de modo coherente con las capacidades correspondientes y crear un plan de acción realista.
- Alejar el pesimismo: Este modo de pensar es contagioso y puede afectar el clima laboral, familiar y todas las esferas sociales, por eso invitamos a centrarse en las fortalezas individuales y colectivas; limitar los pensamientos. negativos y transformarlos en oportunidades de cambio o mejora.
- Ayudar sin suplantar: “Ayuda a tus semejantes a levantar su carga, pero no a llevarla”. Esta conocida frase nos recuerda que debemos cultivar la confianza de los demás en sus propias capacidades en lugar de hacer sus deberes.
- Comunicarse de modo eficiente: Los pensamientos anteriores cobran más fuerza si se logran comunicar y transmitir, por eso un líder debe buscar una forma de llegar a todas las personas de un modo efectivo. Virtualmente parece difícil, pero hay varias formas de hacerlo. Conoce aquí las alternativas.
En SPIRA queremos que los equipos de trabajo se mantengan motivados y desempeñen bien su trabajo. Tenemos soluciones a la medida para generar impacto positivo en líderes y colaboradores para aumentar su desempeño y promover en ellos hábitos productivos.