Los procesos de reclutamiento, selección e inducción son largos y costosos. La rotación exige dejar ir personas que están capacitadas y tienen experiencia en la organización, esto puede significar una demora en el cumplimiento de las metas y en la productividad de una organización.
¿Cómo retener el talento humano y mantener motivados a los colaboradores para disminuir la rotación voluntaria?
Una manera de hacerlo es mediante la formación y desarrollo ya que el crecimiento a nivel laboral y personal se convierte en un factor atractivo y puede ser determinante para mejorar los procesos de aprendizaje y desarrollo de nuevas habilidades. Esto permite que el colaborador ponga en una balanza los aspectos positivos que le brinda su empresa actual antes de pensar en buscar nuevas oportunidades o migrar a nuevas compañías.
Por lo tanto, con un programa de formación que fortaleza y motive a sus colaboradores se puede lograr un desarrollo integral que retenga el talento de las personas aunado a la contribución de sus logros personales y profesionales. Para este tipo de soluciones existen compañías especializadas que crean universidades corporativas, academias y escuelas que dan respuesta a las necesidades del negocio y del mercado.
Así fue como lo hicimos con una firma de abogados de gran trayectoria en Colombia:
Comprendimos que buscaban destacarse frente a las demás, posicionándose e internacionalizándose en el mercado global. Para eso necesitaban desarrollar y formar a todas las personas de la organización: el área misional, soporte, administrativa, entre otras, en temáticas y habilidades que contribuyeran de forma directa y estratégica a los objetivos y necesidades de la firma.
A partir de un diagnóstico, pudimos estructurar transversal a toda la organización:
- 1 modelo de Universidad Corporativa
- 3 líneas estratégicas
- 1 malla curricular que contribuyera al logro de objetivos estratégicos.
La universidad posibilitó el fortalecimiento de habilidades y conocimientos y se convirtió en el vehículo para movilizar su crecimiento y proyección.
En conclusión: El desarrollo integral refuerza los valores de la organización, crea líderes emergentes, desarrolla a las personas según los intereses de la empresa y las personas y es una excelente manera de invertir en capital humano para retenerlos y motivarlos.
¿Te gustaría implementar algo así en tu organización?
Somos expertos en implementar estos programas en organizaciones de todos los sectores.
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